En el mismo lugar...

          

Pasan las noches y pasa el tiempo, pasa la vida, los días, el cielo, las nubes, las estrellas, horas de más y la nada desbordada...
pero no se explicarle a la luna que la miro pensando en ella todos los días, que mi mirada sigue fluyendo perdida hacia una luz que me tuerce del resto y me hace temblar, sentir y dormir el latido más hundido de mi pecho.
Escribo para encontrarte, para sentir el calor de tus manos, pero pasan atardeceres de otro día más y el río corre igual. mis labios, igual de secos, las nubes tendrán siempre las mismas formas. los caminos seguirán a contraviento y yo, seguiré aquí... siendo un jazmín, queriendo ser tu ramo de rosas.
Pasan las noches y el semáforo cambio de color, pero no de lugar, me quede en rojo, agitado y sin momentos, atrapado en tus redes y viendo la vida pasar por el costado de cada verso mientras la mente me apodera en sensación de embriaguez sentimental.
Pasan insomnios y vuelvo a ver el mismo cielo, las mismas estrellas, los mismos días y tú, sigues perteneciendo al mismo mundo paralelo que me separa de ti. Tu sol es el mismo, no hay cartas para mi, las velas siguen encendidas, danzando con el mismo fuego de tu amor y yo, sigo aquí...
No hay manivelas para hacer funcionar este cacharro sentimental, debo estar atrapado en un bucle del tiempo, porque esto crece a cada noche que paso y al día siguiente, es el mismo cielo, los mismos pájaros, las mismas palabras...
Como le explico a estos pobres pies que no encuentro los rieles del tren para seguir el camino antes de volver a perderme. Eh perdido la dirección del viento y no se a donde voy.
Solo sé, que si me pierdo en el proceso de encontrarte entre los pasos desordenados y agitados, lo haré con afán de encontrarte algún día, para abrazarte bajo el mismo cielo, en las mismas estrellas, y en el mismo lugar.